Las estadísticas generales de Callosa de Segura corroboran la solvencia del sistema económico local puesto que, en momentos de cambio general, el tejido productivo sigue manteniendo la capacidad de regeneración y adaptación a los nuevos tiempos, marcados por las transformaciones en el panorama internacional. Este periodo de crecimiento general está siendo fundamental para la diversificación económica, proceso clave en un momento dinámico y cambiante, y con un papel destacado del sector industrial.

La actividad económica y, por tanto, el desarrollo de nuestro municipio, goza de una considerable vitalidad que tiende a progresar gracias a la iniciativa, laboriosidad y visión de futuro de la mayor parte de nuestros empresarios y trabajadores. La ciudad es conocida, entre otros aspectos, por su industria, base de la economía local, destacando las de manufactura de fibras sintéticas, que abastecen el 70% de los mercados nacional e internacional, en hilos, cuerdas y redes, elevándose hasta el 80% referido a redes de protección y para el deporte. Con estas cifras, no es de extrañar que nuestra ciudad sea, en la actualidad, la primera productora nacional de tales manufacturas.

Además de esta primordial industria, heredera de la desaparecida del cáñamo, existen importantes fábricas de calzado para caballero y señora, de seguridad y deportivo; mobiliario, confección, etc.

La exportación derivada de la industria callosina contribuye notablemente, a que la comarca de la Vega Baja presente uno de los mejores saldos exportadores de la Comunidad Valenciana.
La apertura del polígono industrial “San Roque” ha propiciado el asentamiento de múltiples actividades económicas de lo más variadas. La gran demanda de solicitudes de suelo industrial, ha demostrado la capacidad de atracción de nuestra ciudad y su valoración por los empresarios, como ubicación estratégica para la actividad económica, así como la capacidad de crecimiento de nuestras empresas. Buena parte de las parcelas en las que se divide el polígono industrial han sido ocupadas por empresas de toda la provincia de Alicante y Murcia.

La situación económica de Callosa de Segura, demuestra que el sector industrial es una realidad plenamente asentada, si bien el sector terciario es el segundo gran motor de nuestra economía. Junto con las localidades de Orihuela y Torrevieja, Callosa de Segura se ha convertido, en los últimos años, en centro de referencia para los servicios de la comarca de la Vega Baja; sobre todo los vinculados al comercio.

La estructura comercial está haciendo un extraordinario esfuerzo de modernización que está repercutiendo, de forma positiva, en la transformación y el avance del comercio callosino, aglutinando la venta al por mayor y la minorista.

Es preciso hacer una reseña sobre la tendencia decreciente de la agricultura. Actualmente, lo cultivos predominantes son los de legumbres, patatas, hortalizas y cítricos.

Hay que destacar que existe un importante tirón de un sector pujante, e incipiente, como el turismo, atraído por la tranquilidad y belleza del paisaje y el estupendo patrimonio histórico-artístico que ofrece la localidad. Como consecuencia de lo anterior, las actividades recreativas experimentan un ligero crecimiento por las oportunidades de negocio que aporta el turismo y la mayor disposición de tiempo libre de los visitantes que acuden a nuestro municipio.
Es importante mencionar el importante esfuerzo que se está realizando en la localidad para ayudar al pequeño y mediano comercio callosino en su adaptación a las nuevas tecnologías y en la modificación de las técnicas de venta y consumo, impartiendo charlas, cursos de formación y reciclaje, etc.

Las estrategias, de carácter económico, emprendidas en Callosa de Segura durante los últimos años han permitido alcanzar mejores cuotas de desarrollo en determinadas parcelas productivas para, unidas a las ya consolidadas, facilitar un mayor bienestar y una mejor calidad de vida para los callosinos.